domingo, 12 de septiembre de 2010
"IMAGINANDO"
http://www.tudiscoverykids.com/juegos/karaoke_con_doki/todos/imaginacion/
lunes, 12 de julio de 2010
PARÁBOLAS: EDUCANDO CON "VALORES"
EL VIENTO Y EL SOL
Hace muchísimos años, cuando todas las cosas tenían vida e incluso hablaban, el sol y el viento se pusieron a discutir sobre cuál de los dos era más fuerte. La discusión fue subiendo de tono, pues cada uno de ellos estaba super convencido de su superior fortaleza. Estando en plena pelea, vieron que, debajo de ellos, caminaba plácidamente un hombre y decidieron probar con él sus fuerzas. -Vas a ver cómo me lanzo contra él –dijo el viento-, y le quito el abrigo. Dicho esto, el viento comenzó a soplar con todas sus fuerzas. El hombre, al sentir contra su cuerpo los manotazos del viento, dobló los brazos sobre el abrigo para protegerse mejor y se alejó apresuradamente maldiciendo. El viento se encolerizó más todavía y trajo una fuerte lluvia contra el hombre que, en vez de soltar el abrigo, trataba de cubrirse con él lo mejor que podía. Después, el viento descargó contra él una inclemente nevada y lo único que logró fue que el hombre se acurrucara más y más debajo de su abrigo. -Nadie le puede quitar el abrigo –dijo el viento con despecho.
-Eso lo veremos ahora –dijo el sol calmadamente, y sacando su mejor sonrisa entre dos nubes doradas, comenzó a brillar cada vez más y a lanzar mansamente a la tierra su aliento. El hombre comenzó a sentir calor y a sudar, se desabrochó el abrigo y, al rato, se lo quitó. -Acabas de ver cómo te he vencido –le dijo el sol al viento-. Yo he logrado con suavidad lo que tú no pudiste con toda tu violencia.
EL VALOR DE LA LIBERTAD
LA GAVIOTA Y EL PESCADOR
Una gaviota amaneció volando muy alto sobre el mar. Allá abajo divisó, haciendo espumas entre tanto azul, la barca de un pescador. -¡Ah, si yo tuviera una red como la de ese hombre –se dijo la gaviota- no tendría por qué resignarme a agarrar un solo pez tras varios intentos de picada en el agua! A su vez, el pescador, embelesado con el vuelo de la gaviota, se decía: -Si tuviera el privilegio de ver desde lo alto lo que puedo pescar, no me aventuraría tanto en aguas profundas y ni siquiera me alejaría de la costa en la madrugada, cuando todo pescador es ciego y su oído anda extraviado en la inmensidad. Muchas personas gastan su vida sin atreverse a ser ellos mismos, sin plantearse cómo en realidad quieren ser o cuál es su misión en la vida. Viven desgarrados por el afán de imitar a otros, por el deseo de parecerse o ser como alguien a quien envidian o admiran. Educar es ayudar a cada alumno a ser lo que está llamado a ser. A quererse, aceptarse y potenciar todos sus talentos y posibilidades, sabiendo que él es único e irrepetible. Vivir es construirse. La vida exige una lucha tenaz por llegar a ser uno mismo. Sólo ayudarás a otros a ser, si tú te esfuerzas por serlo, si vives comprometido en tu permanente crecimiento interior. Para ayudar a otros a ser auténticos y buenos, tú tienes que esforzarte día a día por ser cada vez mejor. Sólo es posible respetar y querer a los demás si uno empieza respetándose y queriéndose a sí mismo, lo que implica aceptarse y valorarse por lo que uno es, y no por lo que aparenta ser, ni por lo que tiene o dice tener. Recuerda y vive intensamente el poema Yo soy yo de Virginia Satir: En todo el mundo, no hay nadie exactamente como yo. Hay personas que tienen algunas partes en que se parecen a mí, pero nadie es idéntico a mí. Por lo tanto, todo lo que sale de mí es auténticamente mío porque yo sola lo elegí. Todo lo mío me pertenece –cuerpo, incluyendo todo lo que éste hace; mi mente, incluyendo todos sus pensamientos e ideas; mis ojos, incluyendo las imágenes que perciben; mis sentimientos, cualesquiera que estos puedan ser- coraje, alegría, frustración, amor, desilusión, excitación; mi boca, y todas las palabras que salgan de ella, agradables, dulces o bruscas, justas o injustas; mi voz, fuerte o suave; 13 y todos mis actos, sean estos para otros o para mí misma. Me pertenecen mis fantasías, mis sueños, mis esperanzas, mis temores. Me pertenecen todos mis triunfos y éxitos, todos mis fracasos y errores. Porque todo lo mío me pertenece, puedo llegar a familiarizarme íntimamente conmigo misma. Y al hacer esto puedo amarme y aceptarme, y aceptar todas las partes de mi cuerpo. Entonces puedo hacer posible que todo lo que me pertenece trabaje para lograr lo mejor para mí. Sé que hay aspectos de mí misma que me confunden, y otros que no conozco. Pero mientras me conozca y me ame, puedo buscar valerosamente y con esperanza la solución a mis confusiones y la forma de conocerme más. La forma como luzca, como suene para los demás, lo que diga o haga, lo que piense y sienta en un momento determinado soy yo. Esto es auténtico y representa dónde estoy en este momento.
lunes, 10 de mayo de 2010
"Respetar, respetarse y respetar a los demás"
como una comunidad de hormigas debemos ayudarnos...papis y niños guiaran a las hormiguitas a su hormiguero. Ayudémosnos entre todos!!!!
Papis y niños deberán guiar a las hormiguitas a su hormiguero, entre todos lo lograremos!!!!http://www.vedoque.com/juegos/juego.php?j=Hormiguero
lunes, 19 de abril de 2010
LA FAMILIA, LOS NIÑOS Y LOS VALORES
¿Por qué enseñar valores a los niños?
El comportamiento humano está regido por unos principios o valores que son el pilar de la sociedad. Todos vemos, vivimos y sufrimos a diario las consecuencias que ha tenido en nuestra sociedad el descuido de la educación en valores.
Los niños tienen cada vez mayor acceso por la televisión, los juegos electrónicos y otros medios a contenidos que les enseñan violencia, odio, muerte y competencia y si no aprenden desde temprana edad a discernir lo que está bien de lo que está mal, difícilmente lo aprenderán cuando sean adolescentes o adultos. Educar a los niños en valores les permitirá tomar decisiones más acertadas durante toda su vida y esto a su vez los hará personas más seguras, plenas y felices.
La enseñanza de los valores se inicia en el hogar, promovida por el ser y el hacer de los padres y otros adultos significativos para el niño; más tarde, en la escuela estos valores deberán ser ampliados y fortalecidos.
- ¿Cómo enseñar valores a los niños?
Los niños pequeños aprenden con el ejemplo, por lo tanto enseñar a los niños y niñas los valores implica un compromiso personal. Es necesario dar el ejemplo con actos y palabras para que los niños los asimilen, los imiten y los vivan.
Antes que nada es necesario que cada familia tenga muy claros cuáles son los valores que considera más importantes y que por lo tanto, quiera inculcar a sus hijos. Después debe asegurarse de que los niños entienden qué significa cada uno de esos valores.
A continuación se dan algunos ejemplos de conductas y actividades que ayudarán a los niños a vivir algunos valores: - Generosidad :
La generosidad es la propensión del ánimo de una persona a ser útil e interesada a otro ser mostrando nobleza, valor y esfuerzo. Las personas generosas son nobles, desprendidas y dadivosas.
Los niños deben aprender a actuar a favor de otras personas sin esperar nada a cambio, para lo que deben ser educados poco a poco. Los niños aprenden a ser generosos cuando son animados a:
-Ceder sus juguetes en el juego
-Comprender que significa ser generoso y qué significa ser egoísta.
-Compartir sus juguetes y caramelos
-Además, para que los niños sean generosos es necesario que:
-Vivan en un ambiente de participación y servicio
-Vean que sus padres ayudan a otros padres y les hacen favores
-Identifiquen las necesidades de los demás
- Obediencia:
La obediencia es una actitud de colaboración y participación. Para que un niño aprenda a ser obediente debe explicársele el porqué de las cosas que se le piden.
Para que un niño aprenda a ser obediente es necesario:
-Que sepa qué es lo que sus padres o maestros quieren
-Entienda la satisfacción que su obediencia producirá
-Entienda el valor y la razón de cada orden
-Tenga claras cuáles son sus obligaciones y sus deberes
-Tenga reglas claras en la casa y en la escuela
-Sienta la aprobación de sus padres o maestros cuando es obediente
-Sienta que si desobedece no consigue lo que quiere
- Perseverancia:
La perseverancia es alcanzar lo que se propone buscando soluciones a las dificultades que puedan surgir. Es un esfuerzo continuo. Una persona perseverante es menos propensa a dejarse llevar por lo fácil y lo cómodo. La perseverancia brindará a los niños estabilidad, madurez y confianza en sí mismos.
Los niños aprenden a ser perseverantes primero, con el ejemplo de sus padres y luego:
-A través de sus deberes
-Los problemas y dificultades que se le presentan
-Jugando, perdiendo o ganando
-Con sus ilusiones y sus metas
-Sintiendo el apoyo de sus padres
-Sabiendo que se puede aprender tanto de las experiencias malas como de las buenas
-Percatándose de que vale la pena luchar por lo que se quiere
-Cuando tiene que cumplir una tara para conseguir lo que quiere
-Teniendo en cuenta sus triunfos y éxitos
-Recibiendo felicitaciones por sus logros
-Identificando sus errores y procurando no repetirlos
-Cuando reciben estímulos de sus padres
-Haciendo manualidades
- Respeto al bien común:
El niño debe aprender desde pequeño a respetar los bienes comunes que hay en la casa o en la escuela así como los bienes sociales como parques, bibliotecas, monumentos, cines, museos, etc. Los niños pueden aprender este valor con :
-el ejemplo de sus padres y observando las señales de los sitios públicos
-Acudiendo con frecuencia a bibliotecas, museos, parques y otros sitios públicos
-Estando en contacto con la naturaleza y conociendo su valor y los beneficios que nos brinda
-A través de actividades grupales como talleres de reciclaje
- Tolerancia :
Ser tolerante es ser respetuoso y considerado con los demás, aún cuando sus ideas, creencias o prácticas sean diferentes a las nuestras. Para que los niños aprendan a ser tolerantes debe invitárseles a:
-Escuchar a los demás
-Escuchar las opiniones de sus amiguitos
-Ponerse de acuerdo con sus amigos con respecto al juego
-Conocer diferentes culturas
-Viajar con la familia
-Evitar burlarse de los demás
-Responsabilidad
La responsabilidad guarda relación con el asumir las consecuencias de todos aquellos actos que realizamos en forma consciente e intencionada. Los niños aprenden a ser responsables cuando:
-Les permitimos que hagan sus deberes por ellos mismos
-Tenemos confianza en ellos y se lo demostramos
-Evitamos hacer por ellos lo que son capaces de hacer según su edad.
- Tips para la enseñanza de valores
-Leer cuentos que hablen sobre algún valor en especial es una buena manera de ayudar a los niños lo que significa ese valor.
-Organice juegos en familia donde se promuevan los valores.
-Designe una semana para fomentar algún valor en especial. Esa semana lea cuentos sobre el tema y organice actividades para fomentar ese valor hasta que se asegure de que los niños lo han entendido y pueden aplicarlo a situaciones diarias.
-Reconozca al niño cada vez que actúe de acuerdo con el código de valores que usted quiere inculcarle.
lunes, 12 de abril de 2010
EDUCACIÓN MORAL
Por ello creemos de importancia capital, ofrecer desde la institución educativa los conocimientos, procedimientos y actitudes que hagan posible la construcción de criterios morales propios, derivados de la razón y el diálogo. Y pensamos que todo este trabajo se debe iniciar en el Nivel de Educación Inicial, es decir, desde los 0 hasta los seis años.
Orientaciones didácticas para una acertada formación moral que permita a padres y docentes obrar con pautas claras en esta área
Así pues, las nociones de bien o de mal, de positivo y de negativo, de libertad y de responsabilidad, se forman en los primeros años de vida. De allí la importancia de estimular su desarrollo desde la fase maternal y preescolar, mediante la estimulación de comportamientos como el orden, el cuidado de las cosas, la práctica de hábitos de higiene, alimentación y sueño, la paciencia, la amistad, la comprensión y la aceptación de normas de convivencia social.
Entonces pues, es indispensable ofrecer a través de las instituciones educativas desde el Nivel Inicial conocimientos, procedimientos y actitudes que promuevan la formación de personas comprometidas con su sociedad: solidarias, justas, sinceras, capaces de ponerse en el lugar del otro, honradas, etc. y, lo que es más importante, que sepan dar continuidad a la educación en valores. Para ello se requiere que los educadores reflexionen sobre su práctica educativa y cuenten con modelos de posibles actividades sistematizadas que los orienten en el trabajo con sus alumnos, ayudándolos a ir diseñando, a partir de éstos, una metodología propia en función de las necesidades de su entorno educativo. Asimismo, es conveniente proveer a los padres y docentes de lineamientos que les permitan abordar sistemática e intencionalmente esta importante área con el propósito de contribuir en la formación moral de los niños desde el Nivel Inicial integrando esfuerzos escuela–familia y sociedad, transmitiendo en sintonía valores humanos fundamentales dirigidos a la formación de una nueva sociedad y de una nueva cultura.